PERIODISMO
Trabajo Práctico Nº 1
Objetivos:
- Reconocer al Periodismo como oficio y profesión.
- Registrar y analizar las características del Periodismo.
- Debatir los elementos que constituyen al Periodismo.
- Reconocer los diferentes formatos en los que el Periodismo presenta sus trabajos y formas de expresión.
Actividad:
Conformar
grupos de no más de 6 integrantes para trabajar lo siguiente:
1)
A
partir de la lectura del artículo “El mejor oficio del mundo”, de Gabriel
García Márquez, que se encuentra en el Anexo 1, debata en el grupo lo que el
autor quiere significar sobre el Periodismo.
2)
Escriban
las conclusiones a las que arribó el grupo en el punto anterior, señalando si
están de acuerdo, o no, y fundamentando la respuesta.
3)
Detenidamente
lean “Repasando las funciones elementales del periodismo”, de Richard Rodríguez
Revollar, ubicado en el Anexo 2. ¿Qué relación propone entre hecho y noticia?
¿Cuáles son las funciones del periodismo que señala y por qué? Indague sobre la
Agenda-Setting, su importancia y práctica profesional.
4)
Javier
Darío Restrepo escribió “La ética floreciente”, copia adjuntada como Anexo 3,
en la que expone la situación de Internet y su relación con el deber ser. ¿Cuál
es la postura del grupo frente a sus afirmaciones? ¿Por qué? Fundamenten su
respuesta.
5)
Busque
en internet material sobre la película “Spotlight”. Escriban una reseña sobre
ella y conversen sobre su contenido. Elaboren luego un escrito que permita ser
discutido en clase práctica. Si tienen la posibilidad, vean la película para
poder hablar con mayor autoridad sobre el tema.
6)
Lean
el artículo, que está en el Anexo 4, “Los otros ´Sportlight: historias que
cambiaron el periodismo”, de Ángela Bernardo.
7)
Elijan
una historia de las mencionadas en ese artículo y profundicen buscando material
sobre ella. Elaboren un comentario entre todos los integrantes del grupo, con
la intención de debatirlo posteriormente en la clase práctica.
Fecha de entrega del trabajo: la próxima clase
práctica.
ANEXO 1
Anexo 2
ANEXO 2
Repasando las funciones
elementales del periodismo
Richard Rodríguez Revollar *
Una
vieja versión del diccionario señalaba al periodismo como el ejercicio o
profesión del periodista, siendo éste la persona dedicada a escribir en los
periódicos. Dado los diversos medios de comunicación que existen en la
actualidad y las especialidades que han brotado de la ocupación, el mencionado
concepto quedó tremendamente superado.
Mario
A. Cantarero anota que por el constante desarrollo y uso de las nuevas
tecnologías en los medios de comunicación social y, consecuentemente, por la
diversificación y especialización del trabajo informativo, el concepto de
"periodismo" sintetiza la multiplicidad de funciones del periodista
en diversos medios, resume toda la experiencia acumulada históricamente desde
el surgimiento del periodismo en el medio impreso hasta la práctica profesional
en los medios audiovisuales, incluyendo el ejercicio en instituciones públicas
o privadas, y se extiende en estos momentos a la práctica informativa
especializada, investigativa y multimedia.1
El
periodismo es la captación y tratamiento escrito, oral, visual o gráfico de la
información en cualquiera de sus formas y variedades. Es la forma de
comunicación por excelencia de las organizaciones sociales. Su importancia
consiste en que contribuye al rápido desarrollo de las ideas. Alejandro Miró
Quesada G. destaca que el periodismo ha sido el más importante instrumento para
reformar la sociedad. “Es justo reconocer que antes del periodismo se habían
efectuado en el mundo importantes reformas; pero es asimismo indiscutible que
sólo después de la evolución de éste se producen los grandes cambios sociales”.2
Desde
sus albores se comprendió el importante rol del periodismo y la manera cómo
estaba llamado a desempeñar una influencia decisiva en las sociedades. Su
misión es, pues, además de informativa, orientadora y educadora.
Por su
lado, el periodista –en las sociedades democráticas actuales– no es un
profesional “sin más”, como lo dice Quim Gil. “Su actividad informativa tiene
una trascendencia social reconocida y explicitada en el reconocimiento de
derechos como la cláusula de conciencia y el secreto profesional. El respeto a
estos derechos de los periodistas, la independencia de los medios y la
pluralidad informativa constituyen uno de los pilares fundamentales del Estado
de Derecho”,3 indica.
El hecho y la noticia
La noticia
es la expresión periodística de un hecho capaz de interesar al público hasta el
punto de suscitar comentarios. Es un hecho que “dará que hablar” y por tanto
dará pie a nuevos hechos. Es decir, suscitará repercusiones. El hecho es
cualquier cosa que ocurre, algo que hace alguien, algo que dice alguien, algo
que le pasa a alguien. Puede ser un acto, un dicho, un comportamiento o un
gesto, inclusive.
Martínez
Albertos señala que noticia es un hecho verdadero, inédito o actual, de interés
general, que se comunica a un público que pueda considerarse masivo,4 una vez que ha sido recogido, interpretado
y valorado por los sujetos promotores que controlan el medio utilizado para la
difusión.5
La
noticia en sentido amplio –dice este autor– es una materia prima sobre la que
los profesionales de la comunicación periodística pueden trabajar con una de
estas tres disposiciones psicológicas: la información, la interpretación y la
opinión.6 En fin,
las noticias en su conjunto y mediante su acción constante determinarán el
conocimiento que un individuo tiene de su entorno y definirá la posición que
asuma respecto de él.
De otra
parte, Maxwell McCombs, autor de teoría de la comunicación denominada
Agenda–Setting, señala que nadie ha buscado un nuevo concepto teórico de lo que
es noticia desde que Henry Luce lo hizo en 1920 (“todo hecho que llame la
atención del gobierno”). Esta definición de noticia como un problema, como
aquello que llama la atención de las instituciones gubernamentales, ha
determinado que noticia sea sinónimo de mala noticia, indica el analista. “La
solución sería reinventar el concepto”, aconseja.7
Mientras
tanto, día a día se vive una serie hechos en todas partes y rincones del mundo.
La selección de estos para su divulgación a través de los medios informativos
es un proceso complejo. Para ello deben ser medidos con los criterios de los
valores-noticia. Estos son parámetros de actualidad, interés, proximidad,
prominencia, relevancia personal, rareza, consecuencias; a lo que el periodismo
con afanes esencialmente lucrativos agrega las categorías de interés humano
(drama y dolor que promueven la conmiseración) y el impacto que busca provocar
fuertes reacciones emocionales.
Aunque
aquí acabamos de señalar uno a uno los factores, en la práctica éstos intervienen
relacionados, combinados y complementándose entre sí. De esa manera, la noticia
no es una mercancía uniforme y estable sino que su producción se gobierna
arbitrariamente por innumerables influencias, a veces conscientes y otras veces
inconscientes.
El
grupo de noticias forma el noticiero que se transmitirá al público a través de
los medios de comunicación, ya sean estos la prensa escrita, la radio, la
televisión o la Internet. La gente elegirá el medio a informarse según la
profundidad de la investigación que requiera (la radio y la TV son por lo
general superficiales), el lugar donde se encuentre, el tiempo que tenga o
el equipo electrónico con que cuente.
Funciones del periodismo
Maxwell
McCombs sintetiza las funciones de la comunicación social y del discurso
periodístico en tres aspectos: vigilancia (de los peligros y amenazas al
mundo), consenso (organización y producción de respuestas de la sociedad a los
problemas identificados con la vigilancia), y transmisión de la herencia social
(de una a otra generación).
“Tradicionalmente
–explica McCombs– la teoría de la Agenda–Setting ha sido estudiada en términos
de la función de vigilancia: la gente se entera sobre lo que está ocurriendo en
el mundo a través de los medios de comunicación. Se informa a través de ellos.
Sin embargo, los nuevos avances en la teoría hablan sobre su relación con la
función de consenso. Esto significa que los medios ayudan a la sociedad a
llegar a acuerdos porque hacen que la gente hable o se preocupe sobre los
mismos temas. De ahí que la Agenda–Setting responde no sólo a la función de
vigilancia o de información de la sociedad, sino que además, a la del consenso
necesario en toda democracia.”8
Con
respecto al periodismo se ha dicho siempre que su función elemental es informar
a la población acerca de los acontecimientos más transcendentales de la
jornada. El carácter del medio informativo determinará cuáles son esos hechos
trascendentales y cuáles no merecen esa categoría. De la misma manera, es
independiente para determinar cuáles son las otras funciones que debe cumplir y
en qué orden éstas deben ser consideradas.
Las
funciones del periodismo las determinan muchas veces cuestiones ideológicas.
Para el capitalismo, por ejemplo, la prensa tiene como función servir al
sistema económico. Y de hecho lo hace, mediante la publicación de innumerable
material de carácter comercial con lo que pone en contacto vendedores y
compradores impulsando la dinámica mercantil y el sistema económico.
El
socialismo, en tanto, le da a la prensa la función de un frente de combate que
sirve a los trabajadores y al pueblo de plataforma para exigir sus
reivindicaciones y dar cuenta de sus luchas de clase. Expresa además las tesis
de su ideología y se convierte finalmente en vocero del Partido.
Cantarero
ha recordado que “durante la intolerancia política de la década de los ochenta,
en el marco de la guerra fría, se designaba como prensa burguesa a la práctica
periodística cuya característica esencial era ‘servir de vehículo
propagandístico de los explotadores y opresores, y como aparato ideológico de
Estado, con el objetivo de desinformar, engañar y alienar a la población’;
mientras que como prensa revolucionaria a la práctica periodística cuya
característica esencial era ‘la revelación de la verdad, la educación y la
orientación del pueblo, en la construcción de una sociedad sin clases
sociales’”.9
En
términos generales y sin penetrar en cuestiones ideológicas, podemos decir que
las principales funciones del periodismo son, además de informar:
Educar: El periodismo debe ser un instrumento que
sirva para la ilustración de la sociedad. Por estar permanentemente expuesto en
las calles en forma de periódicos, o dentro de las casas a través del televisor
o la radio, es el mejor medio para difundir conocimientos. Cuesta menos que un
libro y sale más barato que contratar a un profesor particular. De esa manera,
es asequible a las grandes mayorías. Alguien con justa razón le ha llamado
alguna vez “el libro del pobre”.
Orientar: La función orientadora es muy importante y
necesaria en toda información de tipo (política, económica, deportiva, etc.)
para que el público no se quede en la simple recepción de las noticias, sino
que obtenga gracias al periodismo desarrollado un criterio fundamentado acerca
de las diversas actividades sociales.
Fiscalizar
la administración pública: Este es
un compromiso de la prensa independiente. De aquí la importancia de la
investigación periodística y la actitud del medio de mantenerse sólido en la
denuncia sin doblegarse hasta confirmar que se haya hecho justicia. Darío Klein retoma la singular metáfora de
que la prensa es el "perro
guardián" del sistema democrático y que esa tarea se ve potenciada cuando
hablamos de periodismo de investigación, la cual como ninguna otra forma de
periodismo cumple esta misión con más idoneidad.10
La
historia del periodismo está llena de grandes hazañas. Una de las más célebres
a nivel mundial es el trabajo de los periodistas de The Washington Post que con la revelación del caso Watergate
obligaron al presidente estadunidense Richard Nixon a dimitir en 1974.
En
Perú, la prensa independiente en la década del 90 fue acosada por el gobierno
de entonces hasta el extremo haber corrido peligro de muerte varios
comunicadores. Esto, por no amilanarse y dar cuenta de los hechos de corrupción
y sangre en las altas esferas del Estado. El caso de los estudiantes de la
Universidad Enrique Guzmán y Valle (La Cantuta) asesinados por el grupo
paramilitar Colina en 1991, fue revelado por la prensa a través de la revista Sí. En el 2000, el diario El Comercio reveló la falsificación de un millón de
firmas con las que se inscribió al ex presidente Alberto Fujimori ante el
Jurado Nacional de Elecciones para una tercera reelección. Claro que mientras
esto ocurría, otros “periodistas” callaban e incluso algunos aceptaban a cambio
la dirección de diarios o programas noticiosos.
La
prensa es además tribuna para que los propios ciudadanos hagan denuncias
públicas contra autoridades corruptas o abusivas y sirve a los trabajadores
para expresar sus reclamos por bajos sueldos o ajustes económicos. Esta función
de control social de los medios permite denunciar excesos de todo tipo. El
diario o el noticiero es una gran caja de resonancia de la conducta individual
y colectiva. Cuando pone sobre el tapete una incorrección obliga a las
autoridades correspondientes a una rápida intervención porque en caso contrario
éstas mismas se exponen a la censura pública. La denuncia conmueve a la opinión
ciudadana y la motiva a la acción.
Servir
a la sociedad: Esta es
una función loable de los medios de comunicación. En las últimas tragedias
nacionales provocadas por la furia de la naturaleza como fueron los violentos
sismos, caídas de huaycos y elevadas temperaturas, han sido medios de prensa
los que organizaron y concentraron la ayuda colectiva para salvar a millares de
damnificados. Aunque reparando en esto, es también una tragedia considerar que
sólo en circunstancias extraordinarias y dolorosas el periodismo debe y puede
servir a la sociedad, mientras el resto del tiempo, para ciertas empresas de
comunicaciones, es más importante obtener el lucro rápido.
De otro
lado, los famosos “teletones” son destacados trabajos emprendidos sobre todo
por los canales de televisión (detrás de los cuales hay un enorme –inimaginable
para los televidentes– despliegue técnico) que tienen como fin colaborar
económicamente con alguna institución pública generalmente de la rama de la
salud.
Podemos
señalar dentro de la función del periodismo de servir a la sociedad, la
difusión de noticias “de interés humano”, las cuales muestran casos dramáticos
de personas desvalidas con la intención de conmover al público y llamarlo a la
solidaridad. Los clásicos “avisos de servicio público” por pérdida de objetos,
robos y desaparición de personas se enmarcan dentro de esta función. Así
también, ciertos casos que han sido aprovechados para el show televisivo como
aquellos denominados “gente que buscan gente” o ese millonario segmento que
trae personas desde los lejanos países para reunirlos con sus familiares de
quienes se separaron hace largos años.
Entretener: Varios medios han hecho de esto su función
principal. El periodismo local prácticamente ha quedado dominado por el
espectáculo frívolo. Han tomado el sexo y la violencia como una fórmula para
entretener y mantener a su público cautivo. Ignoran que es posible entretener
educando, elevando el nivel cultural de la gente. Un claro ejemplo de esto es
la publicación y grata aceptación de los crucigramas, donde los lectores –como
jugando– miden sus conocimientos.
De otro
lado, una buena información puede ser entretenida y muy provechosa a la vez.
Las noticias importantes, inclusive las políticas y científicas, no tienen por
qué ser aburridas cuando se les trata adecuadamente. Además, el humor es –cuando
se usa con maestría– un importante ingrediente en la redacción de una crónica o
artículo de opinión. Por su parte, la caricatura con su festiva tomadura de
pelo es un recuadro que nadie mueve de la sección política por esa grata
sensación de alivio que nos da a los males que nos causan día a día los
gobernantes que tenemos; gobernantes y figuras políticas construidas y
destruidas por efectos mediáticos, precisamente.
_____
Notas:
1 Cantarero, Mario Alfredo. “Periodismo: de la ‘prensa’ a la imprecisión conceptual”. En Sala de Prensa N° 45, julio 2002 Año IV Vol. 2
2 Miró Quesada G. Alejandro. El periodismo. Lima: Servicios Especiales de Edición. 1991. Pag. 71.
3 Gil, Quim. “Ética y deontología periodística en la Sociedad de la Información”. En Sala de Prensa N° 14, diciembre 1999 Año II Vol. 2
4 El Diccionario de Comunicación de Ignacio H. De la Mota (Madrid: Paraninfo. 1988) define “masa” como agrupación humana de grandes proporciones, no mensurables, que es producto en lo político de la democratización; en lo sociológico, del amontonamiento humano; en lo tecnológico, de la mecanización; y en lo cultural, de la unificación de la enseñanza y la concentración de la información. Suma de los receptores de los mensajes que se distingue por el elevado número de sus componentes y por carecer de cualquier tipo de organización interna.
5 Martínez Albertos, Luis. Curso general de redacción periodística. Madrid: Paraninfo. 1993. Pag. 288.
6 Martínez Albertos (op.cit.) Pag. 56.
7 Leyva Muñoz, Paulina. “Hay
que reinventar el concepto de noticia. Entrevista a Maxwell McCombs”. En Sala
de Prensa N° 34, agosto 2001 Año III Vol. 2
8 Leyva Muñoz (op.cit.)
9 Cantarero (op.cit)
10 Klein, Darío. “El
papel del periodismo de investigación en la sociedad democrática (I)”. En Sala
de Prensa N° 29, marzo 2001 Año III Vol. 2
Notas:
1 Cantarero, Mario Alfredo. “Periodismo: de la ‘prensa’ a la imprecisión conceptual”. En Sala de Prensa N° 45, julio 2002 Año IV Vol. 2
2 Miró Quesada G. Alejandro. El periodismo. Lima: Servicios Especiales de Edición. 1991. Pag. 71.
3 Gil, Quim. “Ética y deontología periodística en la Sociedad de la Información”. En Sala de Prensa N° 14, diciembre 1999 Año II Vol. 2
4 El Diccionario de Comunicación de Ignacio H. De la Mota (Madrid: Paraninfo. 1988) define “masa” como agrupación humana de grandes proporciones, no mensurables, que es producto en lo político de la democratización; en lo sociológico, del amontonamiento humano; en lo tecnológico, de la mecanización; y en lo cultural, de la unificación de la enseñanza y la concentración de la información. Suma de los receptores de los mensajes que se distingue por el elevado número de sus componentes y por carecer de cualquier tipo de organización interna.
5 Martínez Albertos, Luis. Curso general de redacción periodística. Madrid: Paraninfo. 1993. Pag. 288.
6 Martínez Albertos (op.cit.) Pag. 56.
7 Leyva Muñoz, Paulina.
8 Leyva Muñoz (op.cit.)
9 Cantarero (op.cit)
10 Klein, Darío.
* Richard Rodríguez Revollar es periodista, bachiller en Comunicación Social por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos de Lima. Es colaborador de la revista electrónica América Reporte y de SdP.
ANEXO
3
La ética floreciente
Javier Darío Restrepo *
En el primer taller de
ética, hace 15 años, el enfoque y los problemas eran otros. Pero los valores y
principios son los mismos. Entonces nos preocupaba encontrar y reflexionar
sobre esos valores universales que singularizan al periodista en cualquier
parte del mundo; y al comparar códigos de todas partes subrayamos la
coincidencia en la verdad, la responsabilidad y la independencia; hablábamos de
normas y, algunas veces de prohibiciones.
Era la ética
de qué hacer cuando la conciencia profesional se encontraba frente a un
desbarrancadero. Las reflexiones conjuntas con periodistas de todo el
continente, aquí en Cartagena o en cualquier otro lugar, desde Washington hasta
la Patagonia, ayudaron a profundizar aquella visión y descubrieron, más allá de
la ética del hacer, la ética del ser. No se trata de averiguar fórmulas para
resolver situaciones complejas, sino de cómo orientar la vida profesional, cómo
ser un periodista de excelencia.
Y en eso estábamos
cuando llegó internet, que planteó los mismos problemas e ideales éticos de los
medios tradicionales, pero amplificados.
A riesgo de que me
llamen otra vez, apocalíptico, mencionaré los problemas y después, también seré
apocalíptico al enumerar las posibilidades éticas que abre internet. El
apocalipsis no es solo la visión de las catástrofes, también es la revelación
de un cielo y una tierra nuevos.
Decía que con internet
los problemas no han cambiado, sólo se han amplificado. Si antes se decía que
la ética periodística limita la libertad para informar, y que cada uno se pone
la ética que mejor le venga, hoy es pensamiento común que el ciberespacio crea
una inmunidad frente a lo ético.
En el pasado y hoy se ha
librado en los medios la batalla entre la lógica comercial y la del periodista
que informa como un servicio, pleito que en internet se acentúa con la
comercialización de todo en un medio que se revela como un espléndido negocio.
Esto convierte a la red en un territorio salvaje, sin leyes mínimas como lo
comprobaron en Túnez en el 2005.
Cuando los asistentes
que buscaban una legislación que protegiera tuvieron que concluir que no había
legislación ni tecnología posible para ese control.
La diferencia no es
mucha cuando los medios tradicionales hablan de negocios. Los medios tradicionales
no son tan excluyentes como internet cuya aparición dio lugar a esa nueva
categoría discriminatoria de los inforricos y los infopobres. También la crean
los medios impresos con sus tabloides sensacionalistas para pobres, y sus
diarios inteligentes y bien informados para los otros. Son los mismos problemas
pero con diferente intensidad. Afirmación que vale cuando uno mira las
posibilidades de internet desde el punto de vista ético.
Un pesimista anotó que
el auge de los medios no fue una buena noticia para la ética. Quizás lo dijo
cuando no se conocían las posibilidades de internet.
La mejor de ellas es la
de convertir a todos los humanos en prójimos. Si la ética empieza cuando en el
horizonte humano aparece el otro, la ética está viviendo su mejor momento con
esta tecnología que suprime el espacio que separa a los humanos y los pone a la
distancia de un clic. Fenómeno similar al que ocurrió cuando desde una nave
espacial el astronauta pudo ver la tierra como una gran cuna azul que flotaba
en el espacio.
Cuando la proximidad
espacial o temporal deja de tener relevancia ética y es posible su presencia
virtual, la responsabilidad hacia el otro se amplifica: se adquieren
responsabilidades con el bienestar, con la dignidad y el respeto hacia los otros.
Ya el otro está ahí con voz e imagen si es skype, en palabras si es twitter,
chat o correo, y estando ahí no puede ser ignorado. Es él, con todo su poder de
interpelación, con su requerimiento de respuesta, más allá de la esfera de la
proximidad.
Adquieren así una
vigencia amplificada los derechos y deberes sobre privacidad, información
veraz, propiedad intelectual, respeto del buen nombre y de la fama. Anota
Niceto Blazquez que “el simple encuentrocontacto-interaccion-interconexión con
el otro en el ciberespacio implica por sí una relación que produce un
acontecimiento ético moral e implica una responsabilidad con el otro.
La otra posibilidad
ética de internet es la que aparece cuando esta tecnología acerca al hombre
posible. Estoy citando al grupo de Oxford cuando se refiere al objetivo
fundamental de la ética de la información que es el florecimiento de la
infoesfera y de todos los presentes en ella, cita que debo a Ward Bynum.
Pero este grupo de
Oxford a su vez es deudor de Aristóteles de quien viene la expresión. Según él,
el objeto de la vida humana es florecer como ser humano, actuando de la manera
que los humanos están equipados para ser.
Ese ser posible que
habita en todo humano como en gérmen, florece, según el razonamiento
aristotélico cuando razona de forma óptima. En nuestro tiempo, Norbert Wiener,
matemático del MIT asegura que el objetivo básico de la vida humana es el
florecimiento como persona y que vivir efectivamente equivale a tener la
información pertinente. Sea válido o no ese esquema racional de lo humano, lo
cierto es que en su estado óptimo el procesamiento de la información conduce al
ser humano a sus más nobles acciones. Y es esta la posibilidad que abre
internet como instrumento de la inteligencia que permite priorizar valores como
la vida, la seguridad, el conocimiento, la felicidad, la paz o la libertad.
Siempre estuvo abierto
el hombre a este mundo de los valores, pero nunca tuvo a su disposición
instrumentos tan eficaces y poderosos para hacer posible su florecimiento como
persona.
Y si la ética es el
inventario de las posibilidades del ser humano, esto que llama Bynum la ética
floreciente, es el argumento de fondo para creer que está a punto de darse una
revolución copernicana en la ética.
Los elementos están
dados: todos los seres humanos, esos referentes éticos, son prójimos; las
posibilidades del hombre cuentan con un poderoso instrumento para la
información y para el acercamiento, y como nunca las palabras y las acciones
del ser humano cuentan con una resonancia universal, para bien o para mal.
Es, sí, la ética de
siempre, pero amplificada, como si una poderosa lente de aumento nos dejara ver
en todo detalle valores y conductas y objetivos. Esto crea un despejado campo
para la utopía, que es el que se trata de explorar y proponer en el manifiesto
ético que la fundación prepara.
*
Javier Darío Restrepo es miembro fundador de la Comisión de Ética
del Círculo de Periodistas de Bogotá, del Instituto de Estudios sobre
Comunicación y Cultura (IECO), de la Fundación para Libertad de
Prensa y de Medios para la Paz. Ha sido defensor del lector de los
diarios El Tiempo y El Colombiano. Es
autor de numerosos libros y artículos en materia de comunicación social y
ganador de diversos premios como el premio a la ética periodística del Centro
Latinoamericano de Prensa (1997). Es colaborador de Sala de Prensa.
Este texto es una conferencia para la FNPI, en Cartagena, pronunciada el 12 de
marzo de 2010.
Anexo 4
Los otros ‘Spotlight’: historias que cambiaron el periodismo
La película Spotlight ha sido premiada con el Oscar 2016. Estas
son otras historias brillantes que destapó el periodismo de investigación.
Spotlight ha ganado el Oscar 2016 en la categoría de mejor película. La cinta, dirigida por Tom
McCarthy, narra la historia del equipo de periodistas que destapó uno de los mayores escándalos de la Iglesia Católica: los
abusos sexuales de decenas de sacerdotes. La cinta es brillante, ya que consigue trasladar al espectador la
tensión, el trabajo, el esfuerzo y el estrés que supuso la publicación de esta
investigación en The
Boston Globe.
Matt Carroll, uno de los periodistas que formó parte de la unidad
'Spotlight', también reflejó su perspectiva
personal sobre
la película premiada en losOscars
2016. Y es que no
hay duda que la cinta de McCarthy ofrece grandes
lecciones sobre
el trabajo informativo que se realiza en los medios de comunicación. Spotlight
no es solo una película brillante, también es una oda alperiodismo
de investigación. Pero antes de este inmenso trabajo, premiado con
el Pulitzer
de 2003 en
la categoría de servicio público, otras historias también cambiaron la forma de
hacer periodismo. Estos son algunos de los otros 'Spotlight':
La radiactividad que sacudía Hiroshima
Wilfred Burchett fue el primer periodista occidental en visitar Hiroshima tras el lanzamiento de la bomba atómica. El reportero contradijo la versión oficial, según la cual en la ciudad no había restos de radiactividad. Lo hizo con un artículo publicado en el Daily Express, en el que escribió lo siguiente: "Martes, 16 de septiembre. Hiroshima. Escribo esto como advertencia para el mundo. Treinta días después de que la primera bomba atómica destruyera la ciudad, la gente sigue muriendo de modo misterioso y horrible, personas que no resultaron heridas por el cataclismo, debido a algo desconocido que sólo puedo describir como peste atómica".
Relato de un náufrago
El escritor y periodista Gabriel García Márquez escribió Relato de un náufrago. Una novela de carácter periodístico en la que se desarrollaban los hechos contados por Gabo durante catorce días consecutivos en el diario El Espectadorde Bogotá. En esta investigación, el reportero aclamado luego con el Nobel de Literatura dio a conocer que la nave se había hundido por sobrepeso, en contra de la versión ofrecida por el gobierno del dictador Rojas Pinilla. La embarcación, como reveló García Márquez, tenía prohibido llevar carga, algo que fue obviado por la tripulación. La carga que llevaban era transporte de mercancía traída de contrabando, una práctica auspiciada por el propio gobierno.
"Hay un fusilado vivo"
Operación Masacre fue el resultado de una investigación periodística realizada por Rodolfo Walsh y Enriqueta Muñiz, en la que destaparon los fusilamientos de José León Suárez. El trabajo, que fue publicado en forma de novela de no ficción en 1956, dio a conocer la masacre de doce civiles ocurrida en Buenos Aires tras el levantamiento fracasado de los generales Tanco y Valle contra la dictadura de Aramburu. Walsh consiguió reconstruir la historia tras escuchar la frase "Hay un fusilado que sigue vivo", contactando con él y uniendo las piezas de estos asesinatos.
InSight y la talidomida
Al igual que sucedió en Spotlight, otra unidad de investigación denominadaInSight destapó el caso de la talidomida. La información publicada en The Sunday Times sirvió para que la empresa fabricante del fármaco -que causó efectos teratogénicos con malformaciones congénitas en recién nacidos- indemnizara a parte de las víctimas.
El escándalo que tumbó a Nixon
The Washington Post
Bob Woodward y Carl Bernstein, reporteros del Washington Post, destaparon un escándalo que a la larga produciría la dimisión de Richard Nixon. Tras un robo en las oficinas del Partido Democráta, los periodistas revelaron una trama organizada desde la Casa Blanca destinada al espionaje de rivales políticos, reporteros y cualquier persona considerada como "desleal". La información fue verificada con la colaboración de Garganta Profunda, una fuente secreta de la Administración que también ayudó a los periodistas a desmontar la estrategia agresiva del gobierno.
La "X" del terrorismo de Estado
Ricardo Arques fue el reportero que destapó inicialmente el caso GAL. Mientras trabajaba en Deia, el periodista descubrió que el policía José Amedo lideraba los Grupos Antiterroristas de Liberación, encargados de la lucha sucia contra ETA y relacionados con terribles episodios como el secuestro de Segundo Marey o el asesinato de Lasa y Zabala. Al incorporarse a Diario 16, él y Melchor Miralles como redactor jefe continuaron la investigación, que reveló un posible zulo en suelo francés y el entramado gubernamental involucrado en los GAL. Tras la salida de Pedro J. Ramírez del periódico, el diario El Mundocontinuó publicando informaciones relacionadas con la financiación del grupo a través del Ministerio del Interior.
Viaje al horror soviético
La periodista Anne Applebaum destapó la historia de los gulag, los centros de tortura y trabajos forzados soviéticos, una investigación premiada con el Pulitzer en 2004. Su trabajo realizó un profundo y detallado estudio sobre la represión en la URSS, que había sido difundida inicialmente por Aleksandr Solzhenitsin. Así pudo reconstruir la historia de los gulag, entrevistando a supervivientes que le contaron casos de auto-mutilación para evitar trabajos forzados. Applebaum fue capaz de revelar cómo estos campos de concentración sirvieron para que la URSS contara no solo con herramientas de represión política, sino también con mano de obra gratuita.
La voz de la tragedia de Chernóbil
Liukov | Shutterstock
La bielorrusa Svetlana Alexiévich recibió el Nobel de Literatura de 2015 por sus investigaciones sobre la tragedia de la central nuclear ocurrida hace treinta años. La crónica que realizó, difundida en Voces de Chernóbil, destapó el desamparo de los afectados, las corruptelas políticas que rodearon al caso y las negligencias sobre lo que ocurrió en Chernóbil, tanto antes del accidente como después del suceso.
Desmontando el mito de las vacunas y el autismo
weerayut ranmai | Shutterstock
Un estudio publicado por Andrew Wakefield en The Lancet relacionaba por primera vez la vacuna triple vírica (Sarampión, Paperas y Rubeola) con el autismo. ¿El único problema? La investigación era un fraude, como demostró el periodista británico Brian Deer. Wakefield actuó de mala fe, manipulando los resultados para que se ajustaran a su hipótesis y mintiendo sobre los doce niños participantes en el trabajo. Tras destaparse las informaciones, el Colegio General Médico Británico expulsó a Wakefield de la carrera profesional como sanitario y The Lancet retiró el artículo.
La "Casa Blanca" de Peña Nieto
En noviembre de 2014, Carmen Aristegui publicó un reportaje especial sobre una casa en Lomas de Chapultepec, con un valor de 7 millones de dólares. Pero no era una casa cualquiera, sino una vivienda adquirida por Angélica Rivera, esposa del presidente mexicano Enrique Peña Nieto, a la empresa Grupo HIGA, beneficiada por el político en numerosas licitaciones, como la construcción del tren México-Querétaro.
En este recopilatorio faltan, sin duda,
muchos trabajos, algunos de ellos tan conocidos como los de Capote, Hitchens o
Kapuscinski. Pero esta lista de diez ejemplos de periodismo investigativo enseñan historias que ayudaron a desvelar lo que el poder no
quería que se contase. Corrupción, ataques contra los derechos humanos,
espionaje o manipulación son algunas de las características de estos reportajes
que cambiaron el mundo. Tal y como logró el equipo Spotlight, destapando un
escándalo sobre la Iglesia católica que no dejaría indiferente a nadie. Tanto
que sus resultados fueron premiados con un Pulitzer y su álter ego en la ficción, con el Oscar 2016 a la mejor película.
http://hipertextual.com/2016/02/spotlight-historias-periodismo-investigacion
No hay comentarios:
Publicar un comentario